23 de noviembre de 2011

Lo que se llama bajon.


Tengo vacios cerebrales. Cual queso que se derrite y desaparece por los poros de la tostada, todas mis ideas de progreso y planes sensacionales para un futuro perfectamente controlado se van y dejan VACIOS. Esos vacios tienen un alto grado de peligrosidad, viniéndose a llenar con pensamientos basura, o lo que la gente llama comúnmente “boludeces”. Y no. Porque cuando ya todo atisbo de positividad se tomo el palo lo único que queda es auto-compadecerme por la puta vida que me toco, y no hay alma que me haga entender que todavía estoy viva y puedo cambiar las cosas y que después de todo mi vida no es tan puta. Soy una máquina de hacer problemas y preocupaciones que se apilan y se apilan como hojas y lo único que hacen es cansarme y molestar. Supongo que el punto de la cuestión no está en que deje de apilar o esconder los papeles, sino en mojarlos con nafta, quemarlos y salir a tomar un poco de aire fresco.  Eso es lo que se llama bajon muchachos, o por lo menos, mi bajon. Disfruten de la felicidad de este post.


2 comentarios:

  1. tu blog es el mas lindo ! me identifica esta entrada aunque no tanto claro pero te puedo entender te sigo , muchos besitos :)

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  2. LOS PROBLEMAS LLEGAN QUERAMOS O NO DESGRACIADAMENTE ENCABRONA Q SIEMPRE TENGAMOS Q SENTIRNOS MAL POR COSAS Q PASAN ....

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