Y las mujeres? Bueno, a las mujeres se les permite llorar, pero pareciera que cada vez menos gente llora. No hay tiempo, hay que buscar la solución y seguir adelante, porque la vida es muy corta, y las lagrimas no arreglan nada. Y los sentimientos quedan sepultados, escondidos, ignorados. Los problemas ya no son problemas si los evitamos. Gran error. Salida fácil? Por supuesto. Es un instinto que llevamos todos en nuestro interior, el de no sufrir. Quien seria tan masoquista de querer el sufrimiento? Nadie. Pero estamos pasando por alto un detalle muy importante. Una vida sin sufrimiento, seria muy aburrida, se sentiría vacía. Como puede existir la noche si no hay un día? Como puede existir la felicidad si no hay tristeza? Todos anhelamos una vida sin obstáculos, la perfección, pero no nos damos cuenta que el mundo es hermosamente imperfecto. Y tal vez, el tomarnos un momento para sentirnos mal, para llorar y entender ese sufrimiento, nos ayude a salir adelante, o convivir con el problema sin que este tome poder sobre nosotros. Por eso, unas lagrimas de vez en cuando son de gran ayuda, por mas insignificante que parezca. Al fin y al cabo, si no las necesitásemos no estarían allí.
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